Gabriel Alomar nació en Palma de Mallorca en 1873 y murió en El Cairo en 1941. CONSAGRACIÓN La hierba del bosque, irreverente, profana la simbólica clave que los arcos unía; no se oye, al toque de Ave María, como en otro tiempo, llorosa, la campana. Sola, triunfal y soberana, la pila se levanta donde un día su frente impura a remojar venía devotamente, la multitud cristiana. Entre pilares caídos avanza una vaca en la iglesia derruida: de las últimas lluvias el agua pura bebe en el mármol santo con sed ardiente, y, en el templo vencido, queda cumplida la gran consagración de la Natura. CONSAGRACIÓ L'herba del bosc, irreverent, profana la simbòlica clau qui els arcs unia; no s'és oïda, al toc d'Ave-Maria, com altre temps, plorosa, la campana. Tota sola, triomfal i sobirana, la piscina s'aixeca on un dia son front impur a rabejar venia devotament, la multitud cristiana. Entre pilars caiguts avança lenta una vaca en l'església derruïda: de les pluges darreres l'aig
Poesía catalana traducida por CARLOS VITALE